II.I Lo perturbador

Las anécdotas de Pablo solían comenzar todas con un «estaba viendo porno cuando…», seguido de las historias más inverosímiles. Además o a pesar de ser un gran contador de historias, normalmente sorprendía a sus novias cuando, tras una llamada importante del trabajo, de sus amigos o de su madre, colgaba y se levantaba con rapidez (cuando no había estado dando vueltas por el salón) y anunciaba «menos mal, me estaba cagando» antes de salir corriendo hacia el cuarto de baño. No fallaba, según decía él: el teléfono es el mejor laxante.

Sigue leyendo